La PGR había asegurado el predio agrícola en Sinaloa donde el lunes pasado fueron "levantados" los jornaleros. Foto: OEM
Organización Editorial Mexicana
13 de noviembre de 2008
Redacción El Sol de Sinaloa
Culiacán, Sinaloa.- Sanos y salvos, pero agotados y temerosos, la madrugada de este jueves regresaron a sus casas los 27 jornaleros agrícolas que habían sido levantados por un comando armado durante la madrugada del lunes pasado.
En grupos de dos o tres y al amanecer se reintegraron con sus respectivas familias, en sus viviendas, localizadas la mayoría de ellas en la zona de Villa Juárez, municipio de Navolato. Ninguno de ellos, sin embargo, se atrevió a dar declaraciones a la prensa.
Lejos de ello se encerraron en sus casas y exigieron a los medios de comunicación respeto a su privacidad y a su decisión de no dar a conocer detalle alguno de los días en los que estuvieron privados de su libertad.
Más aún: a gritos, desde el interior de las casas y con palabras altisonantes, pidieron a los periodistas que se retiraran lo antes posible del lugar. Aparentemente ninguno de ellos tenía huellas de violencia. "Los trataron bien", dijo escuetamente un familiar de uno de los jornaleros.
De acuerdo a las escasas informaciones recabadas en el lugar de los hechos, los jornaleros estuvieron en calidad de secuestrados desde la madrugada del lunes y hasta las primeras horas de hoy, en algún sitio cercano al campo agrícola La Guajira, de donde habían sido levantados.
A primera hora de la tarde, la Procuraduría General de Justicia del Estado ofrecerá una conferencia de prensa para dar a conocer mas detalles al respecto, en el entendido de que muchos de los jornaleros se negaron a comparecer ante el Ministerio Pública y pidieron que no se les molestara más.
En grupos de dos o tres y al amanecer se reintegraron con sus respectivas familias, en sus viviendas, localizadas la mayoría de ellas en la zona de Villa Juárez, municipio de Navolato. Ninguno de ellos, sin embargo, se atrevió a dar declaraciones a la prensa.
Lejos de ello se encerraron en sus casas y exigieron a los medios de comunicación respeto a su privacidad y a su decisión de no dar a conocer detalle alguno de los días en los que estuvieron privados de su libertad.
Más aún: a gritos, desde el interior de las casas y con palabras altisonantes, pidieron a los periodistas que se retiraran lo antes posible del lugar. Aparentemente ninguno de ellos tenía huellas de violencia. "Los trataron bien", dijo escuetamente un familiar de uno de los jornaleros.
De acuerdo a las escasas informaciones recabadas en el lugar de los hechos, los jornaleros estuvieron en calidad de secuestrados desde la madrugada del lunes y hasta las primeras horas de hoy, en algún sitio cercano al campo agrícola La Guajira, de donde habían sido levantados.
A primera hora de la tarde, la Procuraduría General de Justicia del Estado ofrecerá una conferencia de prensa para dar a conocer mas detalles al respecto, en el entendido de que muchos de los jornaleros se negaron a comparecer ante el Ministerio Pública y pidieron que no se les molestara más.
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