HOLA, DISFRUTA DE DIFERENTES MANERAS TU PÁGINA DE "LA UNIDAD MORELOS":

miércoles, 3 de marzo de 2010

CHILE: AUMENTA EL NÚMERO DE VÍCTIMAS POR EL SISMO Y EL TSUNAMI, LA ARMADA CHILENA ACTÚO IRRESPONSABLEMENTE, PROVOCANDO QUE LAS VÍCTIMAS AUMENTARAN POR FALTA DE ALERTA EN RELACIÓN AL TSUNAMI. CONTINÚAN LOS SAQUEOS. FLUYE LA AYUDA SOLIDARIA DE BRASIL, BOLIVIA, CUBA, ENTRE OTRAS NACIONES


nota tomada de LA JORNADA   www.jornada.unam.mx

Pavor ante amago de tsunami en Chile

Constitución. Réplicas de hasta 6.0 grados en la escala Richter se registraron este miércoles en la zona centro sur de Chile, lo que provocó una falsa alarma de tsunami. En la imagen, habitantes de Constitución ciudad huyen de la costa por temor a que el mar volviera a invadir la ciudad. Ap

Siguen los saqueos pese al toque de queda; pobladores se arman para la autodefensa
Bachelet despliega 7 mil soldados más a zonas devastadas; llega a Chile ayuda internacional
El tsunami provocó casi la mitad de los muertos
Viñedos y bodegas fueron destruidos
Foto
Elementos del ejército chileno y voluntarios organizan despensas en el aeropuerto de Santiago para las víctimas del terremotoFoto Ap
Enrique Gutiérrez
Corresponsal y agencias
Periódico La Jornada
Miércoles 3 de marzo de 2010, p. 21
Santiago, 2 de marzo. Chile comenzó hoy a recibir ayuda externa para atender a los dos millones de damnificados por el terremoto y el tsunami que azotaron la región surcentral del país, pero tras el golpe de las olas gigantes que arrasaron localidades costeras en la madrugada del sábado la gente ha comenzado a narrar las historias de horror que vivieron en aquellos momentos, a enterrar familiares hallados entre lodo y escombros y a identificar cadáveres de turistas.
El agua turbulenta del mar se mezcló en la localidad costera de Constitución con el cauce del río Maule e inundó bodegas, comercios y viviendas. Los visitantes que acamparon esa noche en el islote que está en el centro del estuario no tuvieron tiempo de escapar de la ola de diez metros que arrasó decenas de puestos de comida y casas precarias establecidas a la orilla del mar y cuyos restos están ahora mezclados en el fango.
Constitución se encuentra unos 300 kilómetros al sur de Santiago y unos 250 al norte de Concepción, otra ciudad severamente golpeada por el temblor de 8.8 grados en la escala de Richter ocurrido a las 3:34 de la madrugada del sábado y por el posterior tsunami.
Las autoridades locales calculan que el tsunami fue la principal causa de muerte de 350 personas en decenas de pueblos de pescadores y el puerto, es decir, cerca de la mitad de los 795 muertos que hasta este martes ha contado oficialmente la Oficina Nacional de Emergencia.
Vimos gente colgada de los árboles con sus celulares pidiendo ayuda a gritos desde la isla, dijo María Isabel Piña, de 70 años, quien tenía un puesto de empanadas frente a la desembocadura del río Maule, que da nombre a esta región. Hay versiones no confirmadas de que en el islote pernoctaron dos centenares de personas que aprovecharon la luz de la luna, pero sólo cinco sobrevivieron.

No funcionó la alarma
El gimnasio de Constitución, de 50 mil habitantes, es ahora una morgue improvisada. Por falta de electricidad no funcionó el sistema de alarma y luces que las autoridades establecieron hace años y para lo cual se han realizado simulacros en varias ocasiones. Pero después del movimiento telúrico de alrededor de dos minutos, la gente salió de sus casas gritando ¡a los cerros, a los cerros!
Los relatos son similares en otras localidades de la costa, como Pelluhue y Curenipe. La destrucción también se extendió a viñedos y bodegas embotelladoras de vino, como Concha y Toro.
En un principio, las autoridades del gobierno central evitaron hablar de las consecuencias del tsunami, pero las evidencias se han impuesto.
En Talcahuano, puerto de la ciudad de Concepción, la base naval quedó destruida y no obstante que hubo barcos arrojados hasta las calles de la localidad, en el mar permaneció una histórica embarcación de fabricación inglesa, el Monitor Huáscar, símbolo de la guerra del pacífico que libró Chile contra Perú y Bolivia en 1879.
Sin considerar el pasado y el actual litigio que Chile y Perú mantienen por la zona marítima limítrofe, derivada del conflicto del siglo XIX, el presidente peruano Alan García estuvo hoy en Santiago para entregar ayuda.
Y desde La Paz, Bolivia, un avión carguero militar trasladó 40 mil litros de agua potable embotellada, el primero de tres envíos programados por el gobierno del presidente Evo Morales.
Brasil también entregó hoy su ayuda y desde La Habana se embarcaron 27 médicos y enfermeros cubanos.
También España envió un hospital de campaña. La secretaria estadunidense de Estado Hillary Clinton, que hoy estuvo en Sanatiago, llegó con decenas de teléfonos satelitales y apoyo para la contratación de créditos para financiar la reconstrucción, que podría costar hasta 30 mil millones de dólares, según evaluó en Londres la aseguradora británica RSA, lo que coincide con la firma estadunidense Eqecat.
Pese a las limitaciones provocadas por la destrucción de carreteras y puentes, la ayuda de emergencia llegó ya a ciudades y pueblos de las costas, por tierra y por mar, en embarcaciones enviadas desde Valparaíso.
Para facilitar esas labores en Concepción –donde los saqueos de casas, principalmente, continuaron en la madrugada del martes a pesar del estado de excepción y el toque de queda extendido de ocho de la noche a 12 de la mañana–, Bachelet ordenó el traslado de 7 mil soldados más a esa ciudad y el resto de las poblaciones devastadas en la región, con lo que suman ya 14 mil uniformados que cooperan con los cuerpos policiales.
Pero mientras las autoridades restablecen el orden, la gente que conservó su casa o parte de sus propiedades se ha organizado para la autodefensa. En las zonas populares usan palos y piedras. En áreas de grandes residencias, los dueños sacaron sus armas.

Armada de Chile admite fallo al advertir sobre el tsunami

“No fuimos precisos, hubo titubeo de parte nuestra” y se levantó la alerta de manera prematura, dijo.

Reuters
Publicado: 03/03/2010 10:17
Concepción. La Armada de Chile admitió este miércoles que falló en advertir claramente sobre el devastador tsunami que barrió las costas del país tras uno de los sismos más poderosos de la historia, mientras socorristas trabajaban en ciudades y pueblos asolados por la catástrofe.
El sismo de magnitud 8.8 y los tsunamis dejaron casi 800 muertos, buena parte tragados por olas gigantes. Ahora, los dardos apuntan al rol de la Armada. "Fuimos poco claros en la información que le entregamos, no fuimos suficientemente precisos para decirle a la Presidenta (Michelle Bachelet) se mantiene o se cancela (el alerta). Hubo titubeo por parte nuestra", dijo el comandante en jefe de la Armada, almirante Edmundo González, al canal TVN.
Según un documento obtenido por el diario El Mercurio, la fuerza del sismo no disparó de inmediato la alarma temprana contra tsunamis, porque la Armada creyó que el epicentro era en tierra y por lo tanto no había riesgos.
Luego, al constatarse que era en realidad un maremoto, fue declarada la alerta, sin embargo, levantada cuando todavía olas gigantes se dirigían hacia la costa.
El mea culpa de la Armada parece haber llegado tarde. "No se supo nada, solamente por la gente que vio que la mar se estaba recogiendo (...) arrancamos por cuenta propia hacia el cerro", dijo Isaac Lagos, padre de tres hijos y sobreviviente de la caleta Coliumo, arrasada por el maremoto.
Tras el sismo, olas de hasta 15 metros arrasaron con pueblos costeros, islas y puertos, dejando un número indeterminado de desaparecidos. En algunas zonas, el agua penetró más de 2 kilómetros tierra adentro, causando la muerte a cientos de personas.
En el Gobierno de Bachelet, que finaliza su mandato en un semana, dicen que ya vendrá el momento de la "caza de brujas", pero ahora están focalizados en la búsqueda de sobrevivientes y en llegar con la ayuda a los lugares más afectados.
Bachelet trató de calmar el miércoles a la población y aseguró que no hay desabastecimiento, ya que "hay suficientes alimentos, por lo tanto hay que tener tranquilidad (...) hay suficiente combustible".
El desastre golpeó a Chile, principal productor de cobre del mundo y la economía más estable de América Latina, cuando trataba de recuperarse de una recesión causada por la crisis financiera global.
Especialistas en desastres han calculado los daños al menos unos 30 mil millones de dólares. El ministro de Hacienda del próximo Gobierno, Felipe Larraín, dijo el miércoles a Reuters que no podía comentar si las opciones para ayudar a la recuperación incluirían emisión de bonos o usar recursos del cobre.
Los turistas anclados en Chile tras el sismo se dirigieron el miércoles al aeropuerto de Santiago, también dañado por el sismo. Pero sólo unos pocos vuelos despegaban.
Por otra parte, la policía y soldados lograron después de dos días contener los saqueos y la violencia que sumió en el caos a la golpeada ciudad de Concepción, 115 kilómetros al sudeste del epicentro.
Un toque de queda de 18 horas seguía vigente en la localidad, una de las varias ciudades y pueblos donde unos 14 mil soldados patrullan las calles para mantener el orden y asegurar la distribución apropiada de agua y alimentos.
"Estamos más tranquilos hoy, porque vemos a los militares y también hemos visto pasar algunos camiones con alimentos para un supermercado, parece que ya pasó lo peor", dijo Patricia Recabarren, un ama de 44 años.
Un periodista de Reuters dijo que en varios barrios de Concepción la gente ha comenzado a limpiar sus casas y sacar los escombros, en un intento por volver a la normalidad.
Cuatro días después del sismo, socorristas con perros reforzaron la búsqueda en Concepción y otras localidades como Constitución, intentando ubicar sobrevivientes atrapados bajo los escombros y también recuperar cuerpos.
Constitución, la ciudad hasta ahora más azotada por tres tsunamis con olas de 10 metros, concentra casi la mitad de la cifra oficial de fallecidos. Algunos reportes indican que allí desaparecidos llegarían hasta 500, disparando el total de muertos.
Un vez controlados los saqueos, las autoridades pudieron concentrarse el miércoles en la búsqueda de muertos y enviaron socorristas con perros rastreadores.
Bachelet ha reconocido que los esfuerzos de rescate han sido lentos, en parte debido a las rutas cortadas, puentes caídos e interrupciones de energía.
En Concepción, cientos de personas hacían fila en las calles para recibir comida enviada por el Gobierno. La idea de que el Gobierno estaba llegando finalmente al rescate fue reforzada por la recuperación de parte del suministro eléctrico en zonas de la ciudad.

No hay comentarios.: