¡EL CIELO ESTÁ HOY DE PLÁCEMES!

Pues resulta, queridos amigos, que: ¡EL CIELO ESTÁ HOY DE PLÁCEMES!

Y tal vez ustedes se pregunten: "¿POR QUÉ?"

Bueno, pues resulta que nuestro amado y añorado JIMMY HENDRIX  estaba felizmente ocupado haciendo los deberes que le correspondían allá arriba, en el CIELO. Él era colaborador muy cercano de DIOS y hacía todas las cosas que se le encomendaban de manera diligente y responsable. JIMMY HENDRIX estaba encargado, junto con su tocayo JIM MORRISON, del área encargada de ver todo lo relacionado a las vías de comunicación intergalácticas entre el CIELO y la TIERRA. 

Cuando terminó con sus quehaceres, nuestro querido Hendrix se fue al jardín del cielo a reposar la tarde celestial. Sale sobrando que te diga que el jardín era muy bello _recuerda que está en el CIELO_  y ya sabes: rodeado de fuentes de agua cristalina, flores por todos lados, tupido de árboles altos y frondosos, pájaros surcando los espacios aéreos con sus bellos trinos, trisos, grajeos o gorjeos, según la especie; desde luego, no faltan las mariposas, ni las libélulas, ni los chupa-mirtos andando de aquí para allá, de flor en flor, esparciendo placenteramente la vida.  En este escenario, el gran Jimmy se sentó a disfrutarlo, acompañado de un rico y caliente café y una deliciosa rebanada de pastel de chocolate (Je je, ¡no te sorprendas, amigo!: En el CIELO, como en la madre TIERRA, la vida es básicamente para disfrutarla).

Al chico rato, el gran maestro, JOHN LENNON, le hizo compañía a nuestro entrañable guitarrista. Estaban platicando amenamente, recordando viejos tiempos de cuando vivían en la madre TIERRA. En el momento álgido de la charla, JIMMY HENDRIX recibió este mensaje: "Oye, wey (jejeje, bueno, en el cielo no hay porqué ser tan formales), entra a este link...". Al terminar de leer el mensaje, nuestro buen amigo se conectó a internet y abrió el link que le dijeron.  (NOTA ACLARATORIA:  No está por demás aclararles que en el paraíso no usan computadoras como nosotros, pues allá no acostumbran destruir la naturaleza como lo hacemos nosotros. Todo es a través de la mente desarrollada que tienen _jeje, bueno, y chanzón y hasta un poco de ganjah que se han de echar, ¡no crean que no!_  y de esa manera se contactan con nosotros o con los medios de comunicación que existen en nuestro planeta).

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¡Vieran de ver la cara de felicidad que tenían tanto JIMMY HENDRIX, como JOHN LENNON. En menos tiempo que lo que tarda una estrella fugaz en cruzar el firmamento, el jardín celestial se llenó de curiosos que querían ver también lo que Hendrix y Lennon estaban viendo. Estaba todo mundo ahí  alegremente reunido (jejeje, bueno, creo que para ser exactos debo decir: "estaba todo cielo"), desde los muy conocidos habitantes de ese divino lugar (tú sabes: San Pedro, San Juan, Santa Teresa, La Virgen, San José, etc.), así como adquisiciones más recientes como Hidalgo, Morelos, Bolivar, Villa, Zapata, Martí, Lucio Cabañas, El Che Guevara, Sergio Méndez Arceo y tantos luchadores más, al igual que Marx, Engels y Nietsche _sí, aunque no me lo crean, ellos están en el paraíso_; también estaban presentes la madre Teresa de Calcuta, Gandhi, Salvador Allende, Pablo Neruda. Naturalmente todos los rockeros estaban ahí, pues independientemente de la vida que hayan llevado en la madre TIERRA, por el simple hecho de haber tocado rock todos sus pecados les fueron perdonados. Janis Joplin estaba en primera fila, acompañada de una buena botella de whisky; al lado de ella estaba George Harrison; entre otros rockeros más, pudimos ver a Keith Moon, John Paul Boham, Elvis Presley, Brian Jones y muchos otros más. Se han de preguntar si había papas y la mera verdad, casi no: con los dedos de una mano podíamos contarlos, entre ellos, Juan XXIII. Los demás no vivían en EL MUNDO DE ARRIBA, sino que vivían en EL MUNDO DE ABAJO, allá donde vive Hitler, Mussolini, Ben Gurion, Ronald Reagan, Gustavo Díaz Ordaz, Fidel Velázquez, Nerón, Harry S. Truman, la gran mayoría de los presidentes de Estados Unidos, México y toda América latina, etc.

Ahora, con sobrada razón, se preguntarán: ¿Qué estaban viendo que los mantenía tan alegres?

Bueno, estaban viendo este vídeo. Así que disfrútenlo ustedes también: